«Y recuerda [¡Oh, Muhámmad!] a Nuestro siervo [el Profeta] Job [Ayub], cuando invocó a su Señor: Por cierto que Satanás me mortifica con una gran dolencia [mi enfermedad] y un terrible tormento [la pérdida de mi familia y mis bienes].»
Corán, 38, 41.